Archive for febrero 2010

Zapata de nuevo... Moray, Mckay, o Miller.


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El 19 de noviembre del 2009 dio a conocer el INAH una nota informativa, en ella Mayra Mendoza Avilés, subdirectora de la Fototeca Nacional del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH-Conaculta), nos da el anticipo de su artículo publicado en la revista Alquimia, número 36.

En la famosa fotografía de Emiliano Zapata donde aparece en atuendo de general, por un tiempo atribuida a Hugo Brehme, bajo un meticuloso análisis se pudo rescatar la siguiente inscripción sobre la imagen: “Zapata, Photo and Copyright by F.M…”. Mayra Mendoza apunta, “podría ser obra de algún fotógrafo estadounidense poco conocido, llamado F. Moray o F. McKay.” En la revista no se da mayor información, quedando lo esencial en la nota.

Cuál es la noticia: que seguimos sin saber quién tomó la imagen…

Más de una docena de diarios, nacionales e internacionales, y muchos sitios de internet hicieron eco de las declaraciones de Mayra Mendoza.

Ella argumenta 4 razones para negarle la paternidad a Hugo Brehme:

1. La caligrafía usada en la fotografía difiere de la usada por Brehme; la marca “F.M...” no tiene ninguna relación con él.
2. Brehme no acostumbra hacer anotaciones al interior de la imagen, y sus anotaciones al margen eran con letra mayúscula de molde.
3. Brehme no practicó la lengua inglesa.
4. No se ha localizado el negativo original firmado por Brehme, ni copias en algún archivo relacionado con el alemán.

Mayra Mendoza en las notas del artículo da el crédito de la limpieza digital y recuperación del rótulo a: José Antonio Rodríguez y Gerardo Montiel Klint; quienes dieron las opciones en la reconstrucción del apellido.

La nota 7, empieza: “Es inevitable asociar las iniciales F. M., con Félix Miret…”; para luego dar una pequeña explicación de porqué Miret no puede ser el autor. Lo primero que deberíamos tomar en consideración es que en los años previos a la Revolución, y durante el trascurso de ella existieron tres marcas comerciales en México que pueden ser relacionadas con esas iniciales. Félix Miret, quien nunca las usa comercialmente, Félix Martín, quien por razones de diseño usa un logo con las letras “MF”; y un tercer productor de postales con la marca “F. M.”, de la cual desconocemos su significado. No olvidemos, la firma inicia con una "F" y continúa con un apellido con "M", y no solo la marca "F.M.".

Pero como Mayra M. apunta, la fotografía no se registra en Propiedad Artística y Literaria, ni se publica bajo la firma comercial de nadie, ni siquiera Casasola lo hace, y a pesar de la fama actual no se difunde masivamente, dejando abierta la incógnita.

Ahora nos tendríamos que remitir a los autores de las opciones del “apellido”; sin mucha dificultad podemos comprobar que el nombre empieza con una “F”, para continuar después de un pequeño espacio por una “M”, y finalizar con cuatro letras minúsculas.

La primera de las minúsculas difícilmente podríamos decir que es una “o”, siendo las opciones: “i, e, c”, recordemos que la caligrafía es Palmer y en las tres el trazo implica el mismo movimiento, sobre todo al tratarse de la primera minúscula después de la capital con el trazo discontinuo, así podríamos seguir con el resto…

El 20 de noviembre del 2009 el diario Milenio en entrevista con Miguel Ángel Berumen asienta:

"Al respecto, Miguel Ángel Berumen comentó que efectivamente la imagen reproducida en libros, revistas y souvernirs no es de Brehme y afirmó que así lo ha comentado con Mayra Mendoza.

Respecto a los nombres que maneja la subdirectora de la Fototeca —“podría ser de algún fotógrafo estadunidense poco conocido llamado F. Moray o F. McKay”—, Berumen rechaza esa afirmación."

Bueno, el 23 de agosto de 1912 se registró en los Estados Unidos una fotografía, titulada: Zapata, y quien reclama la autoría es: Fred Miller, coincidencia…

Al platicar con Berumen sobre el tema, él desconocía el registro de Fred Miller.

Al momento no sabemos qué imagen registró Fred Miller, de la misma forma al destino de los registros de propiedad Artística y Literaria en México, en los Estados Unidos se separaron los registros de las imágenes, siendo complicado encontrar la fotografía correspondiente.

La descripción es tan ambigua, que solo podemos tener certeza del registro de una fotografía, pero sin saber sí se refiere a un personaje o un lugar. En el caso de tratarse de una persona, estamos hablando del mismo Zapata… El nombre y la fecha son intrigantes, los registros de fotografías de Emiliano Zapata tanto en México como en Estados Unidos son muy escasos.

Regresemos a la imagen sujeto de la investigación, Mayra afirma que se trata de una reprografía, entonces se firmo con tinta blanca el negativo o es la firma sobre una impresión…

Durante los años de la Revolución Mexicana acontecen dos fenómenos en cuanto a los derechos de autor, hay fotógrafos que no registran legalmente sus imágenes pero las marcan como sí en verdad estuvieran registradas, poniendo marcas como: “©”, o “Prop.”, etc. Hay individuos que registran legalmente imágenes sin ser los creadores.

Suponiendo que efectivamente la lectura de la firma es “F Miller”, y que el registro corresponde a la misma fotografía, eso no da garantía de la autoría. Pudiendo existir otros candidatos por razones diferentes y con buenos argumentos para ser el autor de la imagen. Como Berumen comenta, y punto de vista sobre el cual me inclino.

¿Quién era Fred Miller?

Fred Miller, da como dirección el pequeño poblado de Kingsville, Texas, no muy lejano a la frontera mexicana. Kingsville era una ranchería hasta 1904 cuando llegó el ferrocarril, y se le dio el estatuto de ciudad, y paso de ser un área dedicada primordialmente a la crianza de ganado, a vivir de diferentes actividades en torno al ferrocarril. El primer censo a que se ve sujeta la población es el de 1920, en él, de sus 4770 habitantes, solo aparece una familia de nombre Miller, el páter familia: Fred Miller, de profesión conductor de locomotoras.

¿Estaremos hablando de la misma persona?

Fred Miller, nació de padres alemanes, aunque él norteamericano de Illinois, no hemos podido localizar su acta de nacimiento, esto es relevante pues su nombre original pudo ser Frederick Miller, la versión alemana del nombre, y hay indicios de un ingeniero Frederick Miller trabajando en México entre 1909 y 1911; los conductores de las locomotoras eran ingenieros, en el mismo periodo en México casi la totalidad de ellos eran extranjeros.

Cabos sueltos, pues no podemos asegurar de forma tajante que uno y otro eran la misma persona.



Artículo relacionado:
Fotografiando a Zapata.
Aquí podemos encontrar otro caso de una fotografía de Emiliano Zapata, a veces firmada por Hugo Brehme, y que no realizó él.

Actualización, 27 de marzo del 2010.

LA FIRMA.

Esta es la mejor reproducción disponible por nosotros, para el estudio de la firma, la cual no hemos modificado en ningún sentido para mejorar la visión de la escritura. Con la premisa "Zapata, Photo and Copyright by..." podemos leer el texto sin dificultad. El primer inconveniente es la letra capital de "Zapata", en la forma original (1), carece de un trazo para ser una "Z" (2), aparentando una "F", y leemos "Fapata", el ejemplo (3) correspondería a una "Z" completamente trazada, que por demás difiere en su trazo a la "F" capital usada en "F. M..."


En segundo término veámos el trazo de la firma en sí y de la letra "y", que se repite dos veces en el texto de la misma forma. De las opciones planteadas para el nombre: "Moray, Mckay, Miller", Moray es el que tiene menos posibilidades de ser leído. Para leer Mckay hay ciertamente posibilidades, en lo cual es importante tomar en cuenta las otras dos "y".


En el apellido, la última letra tiene la particularidad de terminar con dos trazos (círculos rosas), algo incompatible con una "y", la línea que cruza sobre la letra del trazado del pavimento, contribuye a distorsionar su visión, y en el área marcada con el circulo claro se entre cruzan dos líneas. Es muy frecuente encontrar en las firmas de los fotógrafos, una línea a forma de subrayado, viendo el trazo de esta forma, sin dificultad leemos "F. Miller"...



Artículo relacionado:
En busca del fotógrafo de Zapata, parte I.


La opinión de Mayra Mendoza en video.


México: Fotografía y Revolución


Publicado por Arturo Guevara Escobar en ,

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México: Fotografía y Revolución: es una de las novedades editoriales de finales del 2009, un proyecto coordinado por Miguel Ángel Berumen Campos, y la participación de especialistas como: Mauricio Tenorio Trillo, Marion Gutreau, Laura González y Claudia Canales. En su esfuerzo por documentar por primera vez el fenómeno fotográfico durante la revolución mexicana, en el se da a la luz un listado de nombres, “fotógrafos”. Como ellos mismos apuntan no hay un conocimiento certero de cuantos y quienes fueron; 305, es el número que lograron recopilar.

En el Anexo II del libro, aparecen de forma alfabética en dos apartados con el siguiente título:

Relación de fotógrafos que documentaron la revolución.

El equipo de Berumen debió aportar más nombres; de hecho en su libro aparecen algunos en otra forma. En la relación encontramos el nombre de Manuel Ramos (Manuel Ramos Sánchez); y en la página 8 una fotografía firmada como “Ramos y Cia. Fots”, sin que se agregue esta última firma en el listado. En el pie de la fotografía se asume la autoría de Manuel Ramos a pesar de encontrarse él en la imagen en una posición algo complicada como para ser autorretrato.


Aquí vemos dos circunstancias: a quién se le acredita formalmente la autoría, y quién reclama la misma.

¿La firma “Prop. M. Ramos”, indudablemente ligada a Manuel Ramos es diferente de “Ramos y Cia. Fots”?

La respuesta es…Si

“Prop. M. Ramos” une a la imagen y a su creador material: Manuel Ramos. “Ramos y Cia. Fots” Implica a Manuel Ramos, pero no da certeza de una autoría real por parte de él, expliquemos mejor el punto. “Prop. M. Ramos” es una firma personal, mientras “Ramos y Cia. Fots” es una firma comercial: “Ramos y Compañía Fotos”. Cada uno de estos nombres aduce circunstancias históricas diferentes y también la creación de “individuos” disímbolos. Por lo cual ameritan entradas diferentes en el listado. Lo mismo podemos decir de las firmas “Abitia” y “Abitia Hermanos”, “Scott” y “Scott Co.”, entre otros ejemplos.

La firma “Ramos y Cia. Fots” y la fotografía donde aparece, tiene otro valor.

¿La imagen representa a la “Compañía”?

De ser así tenemos dos datos: 1º la existencia de una empresa fotográfica; 2º los miembros que la conformaban.

Agustín Víctor Casasola por mucho tiempo se le ha ostentado como el fundador de la primera agencia fotográfica mexicana, “Agencia mexicana de Información Gráfica”, durante el 8° Encuentro Nacional de Fototecas, 2007, a la "La Agencia Casasola", se le recompone llamándola la “primera agencia fotográfica moderna del país”. Implícitamente se reconoce que puede no ser la primera…

Y nos tendrían que explicar que quieren decir con “moderna”, por lo menos tenemos dos casos previos a Casasola.

En 1909 “H. J. Gutiérrez Fot.” inicia su trabajo como agencia fotográfica, entre sus miembros se encuentran: Aurelio y Enrique Escobar Castellanos, Ignacio Escobar Hernández, Salvador Vallin y Emilio Pérez Figueroa, de estos solo de A. Escobar podemos reconocerle su trabajo puntual, y a los hermanos Escobar de forma grupal con la firma propia “Escobar Hnos.”; E. Pérez Figueroa en 1918 migra a los Estados Unidos donde ejerce la profesión fotográfica, de S. Vallin conocemos una postal.

En el caso “Ramos y Cia. Fots” podemos suponer que también es anterior a la iniciativa de Casasola; por lo siguiente: Ramos sería colaborador de la agencia de Casasola y en este caso es a la inversa. Por la edad aparente de los miembros en la fotografía publicada por Berumen, es probablemente previa a 1910. En gran parte los miembros de “Ramos y Cia. Fots” colaborarían posteriormente en la empresa de Casasola; son reconocidos fotorreporteros, de quienes se puede identificar su trabajo individual; Armando Morales, Antonio G. Garduño, Miguel Uribe, Abraham Lupercio, Ezequiel Álvarez Tostado, Gerónimo Hernández y Antonio Carrillo.

Otra de las deficiencias que encontramos en el anexo: “Relación de fotógrafos que documentaron la revolución.” Es su desglose y falta de conclusiones.

La lista se divide en dos partes, en una se puede contar con cierta información biográfica sobre los “creadores”, y en la otra el dato mínimo, “la firma o marca”.

Pero hay diferentes categorías involucradas sin tomarse en cuenta de forma metódica. A todos los presentes en la lista se les cataloga como: “fotógrafos que documentaron la revolución”.

Lo cual es una falacia, verdad a medias…

Una primera diferenciación sería: quienes crean imágenes y quienes las usan. Para darle forma al listado se basó principalmente en la evidencia física: fotografías; postales; e impresos, revistas, diarios, etc., y no en el análisis de cada uno de los individuos.

Se ponen a la par, por ejemplo: Miguel Casasola Velazco; Underwood & Underwood; o International News Service. Miguel es un reconocido fotorreportero de la capital mexicana, hermano de Agustín V. Casasola, los otros dos son firmas comerciales, el primero es mexicano radicado en el país y los segundos empresas norteamericanas ubicadas en los Estados Unidos.

Postal editada y registrada por Underwood & Underwood. Veracruz 1914.

Underwood & Underwood, fue inicialmente un productor y distribuidor de fotografías estereoscópicas, fundada en 1882, Kansas, por los hermanos Elmer y Bert Underwood, y eventualmente llegó a ser productor de tarjetas postales y a trabajar como agencia fotográfica; en 1920 la mayor parte de su catálogo se vendió a Keystone View Co.

En las postales editadas por Underwood & Underwood es difícil identificar al fotógrafo original, ya que se usa material creado por terceros y a veces estos mismos reutilizan materia de otros fotógrafos, y generalmente no se dan créditos. Entre 1916 y 1917, en la llamada Expedición Punitiva, Underwood & Underwood obtiene la exclusividad para acompañar y documentar las acciones militares en territorio mexicano, por parte del ejercito norteamericano, para lo cual se le autorizar un máximo de 10 fotógrafos en un momento dado, para cubrir el movimiento de las diferentes columnas. Las fotografías obtenidas de esta forma se ponían a disposición de agencias o interesados en comercializarlas, bajo el principio de un precio fijo para todos, después de pasar por la censura, pero respetando los derechos de Underwood & Underwood.

Postal, Mexican War Series, editada y registrada por International News Service.

International News Service, es una agencia fundada en 1909, por el magnate de los medios de comunicación, William Randolph Hearst, con base en Nueva York. INS recurrentemente registra los derechos de sus materiales en los Estados Unidos, pero astutamente lo hace como ilustraciones, nunca como fotografías. Y en muchos casos se puede rastrear el origen en fotógrafos y fotorreporteros mexicanos como Manuel Ramos. Por lo tanto una imagen registrada en los Estados Unidos por INS, también podría estar registrada en México por otro fotógrafo, o simplemente aparecer como postal anónima, o firmada por alguien más sin registro...

Esto nos lleva a otra división, quién registra legalmente material gráfico siendo su legítimo creador, quién lo hace para garantizar derechos materiales sin ser su creador, y quién simplemente no lo hace.

Postal editada y registrada por Kauth, 1914.

Eliot Kauth, nombre que no aparece en la lista de Berumen registró en los Estados Unidos, el 27 de mayo de 1914, una serie de 12 postales concernientes a la ocupación del puerto de Veracruz, en realidad son falsificaciones de postales creadas durante la Decena Trágica por fotógrafos de la ciudad de México. Al parecer Kauth no era fotógrafo, ni profesional ni aficionado, simplemente un marino que quiso aprovechar la oportunidad económica, lo podríamos llamar un especulador fotográfico.

Fotografía registrada por M. P. Thous, 1913.

Manuel Pérez Thous, tampoco miembro de la lista, registra el 18 de marzo de 1913 en la ciudad de México una fotografía, que representa “Los cadáveres incinerándose en Balbuena”, acontecimiento desarrollado en febrero de ese año, es la única imagen registrada y conocida de él durante el periodo revolucionario, y a pesar de ostentarse como dueño de un establecimiento llamado: “La Hispano Mexicana Casa Amplificadora de Retratos”, por lo cual podemos suponer era fotógrafo, nos preguntarnos porqué solo una imagen. Se trata de una fotografía muy distribuida y reproducida por otros autores, lo cual podría poner en tela de juicio la autoría de alguno de ellos...

Tenemos por otra parte al reconocido productor de tarjetas postales “Félix Miret”, a él sí se le incluye en la lista. Durante los años de 1911 a 1917, a pesar de su abundante producción, son contados sus registros en Propiedad Artística y Literaria, como un par de retratos en 1913; uno de Francisco I. Madero y otro de Porfirio Díaz. Una buena razón para ello, la tenemos en que usa material perteneciente a diferentes autores. Ejemplo: en la Revista Cosmos 1914, página 1424, “Sr. General D. Porfirio Díaz, Ex- presidente de la República mexicana.-Ultimo retrato del respetable estadista hecho en París. Y enviado por el mismo General a la casa Miret de México, a solicitud de esta casa.”…

Postal Miret, Veracruz 1914.

Félix Miret era un español que llegó a México a principios del siglo XX, o finales del XIX, y se le ha considerado “fotógrafo”. La “Casa Miret” se jactaba en su publicidad de ser "la primera y más antigua del País”. Jactancia a fin de cuentas, pues conocemos claramente que los impresores Ruhland & Ahlschier son los primeros en producir tarjetas postales en México, 1897. Aunque siendo un comercio especializado en postales probablemente podría ser el más antiguo, The Massey-Gilbert Blue Book of Mexico 1901, nos hace la referencia: “Nobleza, La (Felix Miret), fancy goods, Pte. S. Francisco 16”; el negocio conocido como la “Nobleza” es la dirección comercial que da Félix Miret para el registro de sus postales en la Propiedad Artística y Literaria, el año de 1908, con la salvedad de ubicarla en los bajos de Av. Juárez 4. En el año de 1903 Félix Miret también se anuncia bajo los rubros de: tabaquería, cambio de moneda y juguetería, siempre con el establecimiento de La Nobleza. Para 1909 encontramos dos establecimientos con el nombre de “Casa Miret”, especializadas en tarjetas postales, una en la calle de Plateros 4 y la otra en San Francisco 54. Finalmente en el transcurso del año de 1918 Félix Miret y su familia regresan definitivamente a España, en su documentación de migración se ostenta como “Comerciante”. En México adquiere experiencia como editor con la publicación, “El Monitor Financiero”, 1910-1911, y probablemente tenga relación con la editorial Miret, de Barcelona que aparece en 1919. Todo parece indicar que Félix Miret era empresario, y nunca fotógrafo.

Hay que reconocer que todos los nombres incluidos en la lista, merecen su lugar, por una u otra razón, que sí redujéramos la lista a los fotógrafos 100% comprobados nos daría una realidad parcial; siendo una mejor idea nombrar la relación de la siguiente manera:

Promotores que documentaron gráficamente la revolución Mexicana.

En ella incluiríamos: Creadores: fotógrafos: aficionados; profesionales, fotógrafos de Estudio, Retratistas, Fotorreporteros, Cine camarógrafos. Productores: editores de libros, revistas, diarios, y tarjetas postales. Distribuidores: Agencias. Coleccionistas. Y Especuladores.

Nos podemos dar cuenta que algunos personajes estarían en una categoría exclusiva, y otros podrían compartir dos o más, pero asignadas las categorías por relevancia.

Manuel Ramos al inicio de su carrera mantuvo un Estudio Fotográfico, para luego dedicarse al Fotoperiodismo, durante todo el periodo de la Revolución Mexicana trabaja de esta forma, ergo lo catalogaríamos como Fotorreportero.

Heliodo Juan Gutiérrez Escobar (H. J. Gutiérrez) antes de cualquiera de sus actividades comerciales, era un fotógrafo de Estudio, especializado en el retrato, durante la Revolución su aportación individual fue con retratos de Estudio, entre ellos uno muy conocido de Emiliano Zapata de 1914; entonces sería catalogado como Retratista. Sin embargo H. J. Gutiérrez tuvo una incidencia en otros campos al mismo tiempo, como fundador y responsable de “H. J. Gutiérrez Foto”, a pesar de no participar directamente como fotógrafo de campo, para eso contaba con una plantilla de empleados, aquí lo colocaríamos como Agencia y Productor, en específico de tarjetas postales.

Hugo Brehme, su nicho de mercado era la producción de tarjetas postales, donde el mismo aportaba el material fotográfico, y con el tiempo se apoyo en maquiladores para la impresión, de forma de llamarlo Producto individual de tarjetas postales.

Hablemos un poco más de los Productores de tarjetas postales.

La tarjeta postal se convirtió en el medio predilecto de distribución de imágenes durante la Revolución Mexicana, no con esto podemos decir que cualquiera imprimiendo una tarjeta postal, en automático lo consideramos un productor de tarjetas postales. Hay que ponderar el volumen de producción, y la intención comercial.

Antes del boom ocasionado por la disponibilidad de tarjetas sensibilizadas para imprimirse fotográficamente como postales, una tarjeta postal en su realización material era trabajo exclusivo de un impresor, bajo diferentes procesos mecánicos como la litografía, y en su concepción intelectual podía haber fotógrafos, grabadores, dibujantes, pintores, etc. Hubo empresa dedicadas desde su concepción exclusivamente a esto, y otras con infraestructura similar que aprovecharon el nicho de mercado; los editores.

Postal editada por M. Stein, collage de escenas villistas.

Max Stein Co., editor con oficinas en State street y Dearborn street, Chicago, empezó a operar en 1900 hasta 1920, de editar títulos de Julio Verne, Bocaccio, o Treasures of humor and thought; paso a imprimir cientos de miles de postales durante la Revolución Mexicana, en gran medida pirateando la fotografías de W. H. Horne, quien no protegía sus derechos de autor. La vocación inicial de Max Stein es la de editor, pero en el caso específico de “promotores que documentaron gráficamente la revolución Mexicana”, su actividad principal fue producir tarjetas postales, en su mayor parte de baja calidad.

Postal editada y registrada por International Film Service. Casas Grandes 1916.

Otra empresa de este tipo por su magnitud de producción fue, International Film Services (IFS); creada por William Randolph Hearst en 1915, con la intención de explotar la popularidad de las tiras cómicas, controladas por el emporio de Hearst, entre otras cosas dueño de 17 diarios y revistas, de International News Service, e International Picture Service. Al ampliarse al mercado de las tarjetas postales, podríamos suponer de donde provenían las imágenes; de sus Agencias fotográficas, y extrayendo tomas fijas de películas.

Una de sus subsidiaras era Hearst-Vitagraph News Pictorial, a través de ella a principios de 1916 de forma irregular, Tracy Mathewson su camarógrafo logra filmar 8 rollos y por lo menos hacer 30 negativos fotográficos de la entrada de las tropas norteamericanas en territorio mexicano, siguiendo la columna militar por algunos días. Este material sería confiscado por el War Department, y tras su censura y un convenio firmado entre Pathe Exchange Inc., Gaumont Co., Seling Tribune, International Film Service Inc., y Universal Film manufacturing Co., Universal Animated Weekly, se libero el material sobre la base del contrato establecido con Underwood & Underwood para la fotografías fijas.

Las arbitrariedades propiciadas por William Randolph Hearst, fueron muchas y reiteradas en relación al manejo de la información concerniente a la Revolución Mexicana; en ello había interés personal.

Hearst, fue amigo del Presidente Porfirio Díaz, a quien visitó en algunas ocasiones en México mientras vacacionaba; había heredado grandes propiedades en México, donde se incluía la hacienda de San José Babícora, Chihuahua, con una extensión de 361,390 hectáreas, amén a otras en Guadalajara y Yucatán. La propiedad del magnate Hearst abarcaba lo que hoy conocemos como el Municipio de Gómez Farías, Ignacio Zaragoza, Madera y Namiquipa. La propiedad estuvo bajo control Villista por dos años y finalmente se expropio, no sin redoblados esfuerzos de Hearst por recobrarla, se dice que se llevó miles de cabezas de ganado a los Estados Unidos, arrebatándoselas a los villistas por medio de un ejército personal, busco por todos los medios la intervención directa del ejército Norteamericano, tratando de inclinara la opinión pública y al gobierno de su país, hacia una guerra abierta entre México y los Estados Unidos. De ahí que la promoción gráfica de la revolución Mexicana, hecha por Hearst no atendía al interés informático, ni económico resultado de la venta de postales o imágenes a diarios y revistas, sino a su propia política, sin negar que obtuviera jugosas ganancias monetarias en el proceso.

William Randolph Hearst sin ser fotógrafo, tuvo la suficiente influencia para determinar de forma masiva, que, cuando y como se mostraba al público norteamericano su visión de la revolución mexicana, e inclusive en Europa.

Postal fotográfica editada por W.H. Horne, 1916.

La producción masiva de tarjetas postales fotográficas fue posible alrededor de 1908, con la invención de impresoras fotográficas mecanisadas; Ellis Graber’s Photographic Machine Works, Tunbridge Wells England, era uno de los fabricantes, quien hacía ostensión que en México Aurelio Loyo Ortega y la American Photo Supply Co. habían comprado sus equipos, así como ACME Photo Co. en los Estados Unidos, Kodak también los adquirió. Estas máquinas en 1910, podían imprimir, revelar y fijar 1500 postales por hora, incluyendo una impresión tipográfica en el reverso. Se sabe que Walter H. Horne gasto $1,500 dólares en la compra de una equipo, sin conocer de cual fabricante, y que llegó a imprimir 5 mil postales en un día. Por el tipo de impresiones dejadas por La Casa Miret, podemos suponer que ella también ocupo el sistema, durante 1910 inclusive llegó a manejar finas postales con los rótulos impresos en hueco gravado con las letras doradas.

Aquí mencionaríamos la mancuerna de la Casa editorial de Miguel Retes, de Mazatlán, Sinaloa, editora del El Correo de la Mañana, y El Regular; con el fotógrafo y empresario capitalino Heliodoro J. Gutiérrez, para producir tarjetas postales en 1910, 1911 y 1913.

Productores de menor monta en los Estados Unidos, eran: Mexican War Photo Postcard Co., Kavanaughh’s War Postals, Am B & P Co. photo, America's Feature Film Co., Mutual Film Corporation, Photoprint, Keystone View, H.H. Stratton, Underwood & Underwood.

Productores a nivel personal: Robert Ruyon, Schockey, Walter H. Horne, Kauth, Jorchke photo, etc.

En México es muy difícil establecer un comparativo en cuanto a los niveles de producción con su contraparte norteamericana, no existen datos, un gran productor mexicano como Miret probablemente sería mediano en los Estados Unidos, o inclusive podría ser superado por individuos como W. H. Horne. En algo donde no puede ser superado con facilidad es en su calidad.

Casa Miret, H. J. Gutiérrez Foto, F. K., son de los “grandes” productores por volumen en México. De los productores de tarjetas postales a nivel personal podemos mencionar a Sabino Osuna, Hugo Brehme, y los Hermanos Escobar, Arriaga Hos., F. I. Ferrando, Garduño, Hopkins, M. M. Alba, etc.

Es curioso que de los abundantes fabricantes de tarjetas establecidos en México antes de la revolución muy pocos continuaran trabajando con la nueva temática, sobre todo con la crisis del papel de 1915.

Después tendríamos una larga lista de fotógrafos y fotorreporteros, que usan las tarjetas postales como medio de supervivencia ante las difíciles condiciones económicas en México, o como una actividad de oportunidad en los Estados Unidos, sin ser su medio nato.





H. J. Gutiérrez, Propiedad Artística y Literaria, mayo 11, 1911


Publicado por Arturo Guevara Escobar en

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Actualizado enero del 2012.
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Heliodoro Juan Gutiérrez Escobar, es de los pocos fotógrafos mexicanos con inclinación por registrar oficialmente sus trabajos. Había iniciado esta actividad de manera muy esporádica en 1907. Durante los primeros años de la Revolución Mexicana, será notorio el gran número de imágenes registradas a su nombre, el primero de dichos registros se hace el 11 de mayo de 1911, con 16 fotografías.

De primera instancia se podría pensar que se trata de material relativo a la revolución Maderista. A pesar que desde abril de ese año el fotógrafo Aurelio Escobar Castellanos ya está suministrandole imágenes del conflicto a la agencia fotográfica “H. J. Gutiérrez Foto”, los registros del 11 de mayo, son fotografías realizadas el año de 1910.


Las 16 imágenes son concernientes a tres acontecimientos previos al alzamiento del 20 de noviembre de 1910:

1º. La convención de los partidos Nacionalista Democrático y del Nacional Antirreleccionista, iniciada el 15 de abril de 1910, en el parque y teatro Tívoli del Elíseo, ciudad de México. Arrendado para ello durante tres días. Como Francisco I. Madero estaba sujeto a una orden de aprehensión y se mantenía oculto, no se presentó al inicio de la convención.

2º. Una vez votadas las propuestas para las candidaturas; ganadas por Francisco I. Madero para la presidencia y del doctor Vázquez Gómez en la vicepresidencia, ambos personajes se presentaron públicamente el día 17 de abril de 1910.

3º. Madero aparece en público gracias al apoyo popular, y la presión que se ejerció durante las manifestaciones los días 17 y 18 de abril, en la ciudad de México, por lo cual el Gobierno consideró imprudente ejecutar la orden de aprehensión en contra de él. La primera manifestación por las imágenes, se realizó a lo largo de Av. Juárez, San Francisco y desembocó en el Zócalo. La segunda fue en el exterior e inmediaciones de la vivienda de los Madero en las calles de Liverpool y Berlín.

Tomando en cuenta estos tres hechos, podemos apreciar que el orden dado a las fotografías en su registro no es cronológico. La numeración en las fotografías publicadas en formato 8x10, o en postales, en todos los casos coincide con el registro en Propiedad Artística y Literaria, aunque los rótulos en algunos casos cambian.

Nº2. Francisco I. Madero dirigiéndose al pueblo.
Portada del libro: La Revolución en la Ciudad de México 1900-1920.

La primera, con el rótulo: “Francisco I. Madero y Dr. Vázquez Gómez.”, con toda probabilidad se realizo el día 17, lo mismo la “Nº3”: “Aceptación de candidaturas”. Mientras la “Nº2”: “Francisco I. Madero dirigiéndose al pueblo”, corresponde a la manifestación del día 18. La “Nº4”: “Convención Nacional Democrática” podría ser al inicio de las sesiones el día 15. De la misma convención son las registradas con los números: 6, 7, y 8. Mientras las 5, 10, 14 son del día 17.

Es interesante notar como esta serie se registra al día siguiente de la toma de Ciudad Juárez, punto de quiebre para la revolución maderista, en su camino para convertise en gobierno. Y como ha señalado John Mraz, resulta un claro ejemplo del compromiso político de la "H. J. Gutiérrez" con el maderismo y el oportunismo económico con que actuaba. La victoria maderista se anticipa recalcando el carácter político de su movimiento, y no los medios militares, aunque posteriormente así se hace.

Para consultar la serie fotográfica 

Se busca... H. J. Gutiérrez, segunda parte.


Publicado por Arturo Guevara Escobar

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Hace casi seis meses en este mismo Blog publique una entrada titulada: “Se busca…H. J. Gutiérrez”. En ella hacía la invitación para la participación de ustedes estimados lectores, para compartirnos sus imágenes de H. J. Gutiérrez. He recibido algunas respuestas las cuales agradezco, y en esta ocasión, aparte de reiterarles la convocatoria, doy a conocer sus aportaciones.

Daniel Escorza, investigador del INAH, mandó una fotografía del estudio de H. J. Gutiérrez, que se encontró en una publicación llamada Álbum Histórico Mexicano, editado por Alejandro Sodi y Salvador L. Betancourt, en 1923. En la misma aparece retratado don Heliodoro Juan Gutiérrez Escobar, como pie de imagen se lee: “Con medalla de Oro en la Exposición de Milán”, dato testimonial de la obtención de la presea.


Jaime Moran, mandó dos fotografías, la primera de la boda de sus abuelos: Raymundo Morán Fidalgo y Sara Hurtado, en el estudio H. J. Gutiérrez de Madero 34, sin conocer la fecha exacta la ubica cerca de 1920. La segunda es la imagen de un niño o niña, en su presentación de los tres años, o su bautizo… También del estudio de Madero.



Carlos Villasana, amablemente me obsequió la fotografía de una niña en su primera comunión.


Por último el investigador e historiador Samuel Villela compartió tres fotografías de su colección particular, de las cuales presentamos dos, ya que coincidentemente la tercera es una copia de la obsequiad por Villasana; que pequeño es el mundo...



Los grandes esfuerzos están compuestos de la suma de diminutos pasos, he aquí la prueba de ello. Esperamos poco a poco ir sumado más, para reconocer el valor de este fotógrafo cuyo archivo está irremediablemente perdido.

Seguimos recibiendo sus colaboraciones de fotografías firmadas por: H.J. Gutiérrez, estudio Marst, o fotografía París.